Uno de los principales problemas medioambientales a los que se enfrenta nuestro país y de forma más global el mundo entero, es la contaminación hídrica debido a la acción del hombre. La gran tipología de contaminantes (metales pesados, contaminantes orgánicos, colorantes, etcétera), su persistencia en el medio y posterior paso a la cadena trófica, hace que sea un reto mayúsculo para los científicos de nuestra era en el contexto del cambio climático.
Uno de los contaminantes es el azul de metileno el cual es utilizado en diversos ámbitos como en medicina, industria textil e investigación.
Existen varias técnicas para descontaminar aguas procedentes de diversas fuentes (filtración por membrana, intercambio iónico, precipitación, adsorción, tratamiento UV, etcétera). De entre todas ellas, la adsorción ha demostrado ser la más económica y eficaz siendo útil para la eliminación de diversos contaminantes.
Por otra parte, como desgraciadamente es sabido por todos, vivimos en el contexto de la pandemia generada por el COVID-19. Productos como la mascarilla, gel hidroalcohólico, sprays desinfectantes, etcétera, ahora son ampliamente utilizados y generan una gran cantidad de residuos sólidos que deben tratarse adecuadamente.
Las mascarillas quirúrgicas desechables están compuestas de celulosa y polipropileno (PP), sustancias que han sido estudiadas como adsorbentes con anterioridad.
El presente estudio pretende evaluar la descontaminación de aguas con azul de metileno mediante un absorbente fabricado a partir de mascarillas quirúrgicas desechables. Para ello se realizará un estudio en régimen estático y una vez comprobada su eficacia, un pequeño prototipo de una planta de adsorción en régimen dinámico.
